viernes, 28 de septiembre de 2012

Admiración total, agradecimiento... 
Eugenia León es simplemente 
alguien muy especial en mi vida.  



Entraste a mi vida como el aire fresco 
para quedarte a solazarla con tu canto  
trova, bossa, blues, bolero, danzón o tango 
marco exquisito oportuno al escenario 
con retoque magistral de tu voz y tu presencia 
matiz que a cualquier canción vuelve soberbia 
deleitando por entero al que te observa... 
 
Un 'aquí me quedo' llegó de tu sólida tonada 
a lo profundo del alma y de mi entraña 
compañera de amor o desamor, dicha y desgracia 
eco de alegría, de mar profundo de poesía 
junto a ti, Velarde, Sabines, José Alfredo, Marcial, David o Lara 
son amados escultores de mis días. 


Dibujas el sol, sirena de canto agua celeste 
susurro de las olas que mi sangre agolpan 
de días grises, luna llena, tempestades, calma 
me llevas a remar despacio y decidida 
complemento de un amante que a su enamorada atina 
corazón de león, corazón mexicano, mujer divina 
anhela mi ser tu fuego de palabras 
juego en ritmos, notas musicales como armas 
que consiguen encontrarse con la espera 
de una muerte feliz y en paz a mi destino. 
 
Mensaje y armonía eligiendo sus oyentes 
de dispuesta escucha, plenos los sentidos 
amorosos cautivos de delicado paladar y fino tacto 
grata vista, justo embeleso, reanimado olfato 

al suave sabor de licor que tu canción derrama 
con presta destreza seduce, embriaga calma  
en sublimes rutas de amor, dolor, decepción u olvido 
y hasta cálida ternura de un grillo cantor, tu gran amigo 
tu existencia para mí un gran regalo encarna: 
por ti agradezco tener estos oídos. 
 
Son genuino, corazón gigante de la tierra que te encanta 
paraíso que a la luz, curiosa, ha detenido 
a mirar los sueños y emociones que exaltas 
con tus acordes de viaje hacia el pasado 
aterrizas respeto a un pueblo violentado con olvido, 
redimiendo penas, gritos y ánimos levantas 
al compás norteño, balada, son, vals o corrido 
entre costas y palmeras, por el sur, tus pasos sigo... 


No estoy junto a ti y te siento muy, muy cerca 
soy honrada de que vivas en mi casa -que es tuya- 
en mi corazón y mi voz: te sigo como niño a su maestra 
aprendiendo fielmente de lo que dices, sientes, piensas 
no puede dar mejor obsequio en la vida quien educa: 
ejemplo de pasión profunda por la música y sus letras 
de plenitud de amor y libertad, talento, inteligencia 
en tu voz he visto a Dios, sincera he de decirlo, 
desde tu fiel y hermoso nombre, Eugenia 
que a tu persona "bien nacida" quedó preciso. 
Love, amiga
(Hace tiempo nacieron estas palabras,
espontáneas, aún vivas, vigentes, para Carol Love)




Deslindando pasión de los retratos
incertidumbre de pasajes trágicos
explorando el tejido: intenciones, tonos, trazos
en sumersión intensa de lo humano
toda cerebro, talento, corazón

Como sol nos llevas de tu mano
y delicada, lo rugoso vuelves suave
en lo estético y profundo partes el aire
consintiendo la imaginación
agitas la mar sin vanidades

cabalgan felices las ideas
que rehacen paradigmas del pasado
eres prueba viva
que el instante que mueve lo creado
es inmune a la distancia y a la muerte
jamás exclusiva
de un lugar
una persona
unos años

dilución certera y arte
esculpes la piedra en equilibrio
con fuerza y fineza de mirada, voz y manos
de mármol o bronce haces formas exquisitas
a simple cantera, arena, hielo, vidrio
descubres armonía, dotas sentido

modelando de frente y sin temor
asomada a la vida en un balcón
defines sueños, deseos y realidades
la cala misteriosa e infinita
inherente en nuestra humana condición

llevas claro hasta el oscuro
los más altos ideales llevas junto
haces transparente perspectivas grises
mujer de muchas voces y alma grande
valiosa médium de conciencias y emociones
con propia virtud te quedas y transiges

ser de luz
luz distinta
sólo de ti
orgullosamente amiga mía
especial deleite de la vida
conocerte
quererte
coincidir...
Brevito (28-04-12) 

-Dedicado con mi corazón para Carol Love-



Semilla, agua y tierra
portento en follaje
perfecta escarlata que pintas al aire
perfume y esencia
de huesos y carne
frutilla silvestre de todos y nadie


del tinto de mesa
cargas en tu sangre
néctar y paciencia, tiempo, culto y arte
sabor a vehemencia
suelo degustarte
como agua en la boca que lleva al potaje

corriendo en tus venas
generosa sangre
con ella, las cosas que al mundo compartes
si tú no estuvieras
no habría nunca nadie
que cargue como el tuyo, corazón tan grande...