Eco
                                                                                          "...espíritu y materia vulnerables
                                                                                                                                                  a todos los oprobios y las dichas..."
                                                                                                                                                                           Jaime Torres B.

La traición del tiempo 
no puso seña o sobre aviso
de un punto final,
natural
que estaba sucediendo

La condena de lo póstumo
y no volver más a tus ojos risueños
¿a quién reclamar la condición humana
de aferrarse a lo incierto?

de escuchar juicios vanos
de los que sólo se encarga el universo...

con tu sabiduría me quedo
tino pulcro y oportuno de silencio
con cada mañana de un ayer
nutriendo en cada niño el pensamiento

ayer te fuiste pero hoy
el sol es más bello
y el viento, brisa que me toca
revela tu imagen de hombre bueno

una pausa al dolor
y sonrisa en mi corazón
cuando te piense
¡Maestro!

Despierta

Para cuando suceda

Ni sed
ni hambre
calor
ni frío
ni falta de cariño

Preguntarme a diario
qué asunto
detalle o idea
pone en pendiente al pensamiento
para poner fin
tal vez
a algún posible problema

Sonreírle muy de cerca
y abrazarla fuerte
como quien corresponde
a una larga espera

Y así
levantar el vuelo sin carga y sin pena
emprender camino
como quien se dispone
a mover la hamaca
una tarde fresca
y sueña

que la vida eterna
me acoja dispuesta
ligera... 

Nada II

Decir el tiempo pasa

en el instante preciso que la conciencia te atrapa

te rebelas a quien eres

los sentidos engañan

cuando logre

cuando llegue un día

el engaño o condena de un mañana

contrapuesto a las certezas

de las cosas

de la vida

cada vez más clara

con el tiempo ¿qué más queda sino ganas?

he de cultivar este anhelo

de perderlo todo

que sólo quede paz

tal vez luz

de la que nombran nada

Nada  

 

Decir cualquier idea
es contaminarla

se vuelve relativa al pensamiento que la atrapa
ya no es la original
ni pura
o intacta

Y si nada importa ya
más que la raíz y fuente
de aquello que subsiste
al tiempo y la distancia

y en este raro afán
de no arriesgar el ánimo
que se quiebra
ante la mínima
seña de nostalgia

no diré nada

desde hoy,
pensarte
me basta

el tiempo me ha llevado a cuenta
de creer
que el sentir
no requiere de palabras

Confianza

Confianza

Origen de ideas
encanto de palabras
pintando libertad desde el impulso
hasta morir en la boca
en la tinta
de quien decide y quebranta
 
Sinsabores y deleites escapan
van y vienen, dan vuelta 
creando ruidos en el alma
 
cazar en el aire alguna imagen
sonrisa
leve sonido de una voz
timidez de brillo en la mirada
que eriza la piel y provoca
hormigueo de nostalgia
 
cerrar los ojos
envolver un silencio consecuencia
cual pausa no obligada
 
por gusto producir, evocar
en quien piensa y habla
manantial sin final
ligera ruta y bullicio de agua
 
volar como destino confiando en la roca
y en sólo breves paradas
recobrar fuerzas

buscar o encontrar momentos 
en que el deber no trunca 
un deseo natural de depurar el tedio
desánimo
risa
desconcierto
y ansia 
 

Agua 

Soy agua dulce que una sed mitiga
limpia palabras sucias a una boca
y en la boca otra vez se vuelve agua
y expresiones apacibles

Soy aquella que, sin tierra
mantiene  alegres las flores
y también hospeda plantas
e inagotables y vistosos peces

En un sueño, soy aquella que cae del cielo
repiqueteando según la superficie
si es en cristal lo vuelve claro
si es en tierra, verde y floreciente

Contenida, soy espejo o simple charco
de quien me mire depende 
yo me siento bien conmigo
colmada en minerales y nutrientes

Soy la misma que una vez mantuvo en vida
la planta egoísta de un amor ingrato  
que me bebió casi toda, sin medida
sin importarle terminar con el abasto
de una sed, unas flores, unas plantas, unos peces, un paisaje...

Deseo

Si mi boca mandara al pensamiento
le diría que no evoque más el beso
ni la sensación de un latente deseo
de caricia en unas manos emergiendo

Que no motive más suspiros o sonrisas de recuerdo
ni te traiga con la lluvia o el aire fresco
no perciba tu sabor en el café que bebo
y no escuche más tus pasos ni tu voz en el viento

No reconozca en mi libro aquel cabello
que dejaste una mañana fría, de juegos
de locuras, con tu humor travieso
que erigió la eterna ilusión de real afecto

Que permita esquivar el punto en que muero
porque no estás, ni cerca de mí te tengo 
y un cristal asoma de mis ojos si lo pienso
pedirle también que libere los momentos
felices junto a ti, y mencionar no puedo
y viven en mí, muy dentro 
en este corazón quedaron presos

Que devuelva mi alegría porque me quiero
y aunque te quiero aún, espero
de una buena vez convencerlo
que desvanezca ya la imagen de tu cuerpo
y tus huellas de mi vida, aunque fuera lento,
todas esas profundas marcas que aún conservo
que por favor me ayude, apoyando mis intentos...