Infinito
Una noche oscura vi tu rostro
me anunciaba tristeza sin mirarme
presagio de una pena era el brillo
que temblando, agitaba tus pestañas
un fruncir de labios contenía
palabras, abrazos, aire, agua
dibujado en gestos la evasiva
de mirarme como antes, tantas ganas
Y el miedo, que tanto se asomaba
negado muchas veces fue explosivo
pinchado con sonrisas y miradas
contener tanto deseo hizo estallido
en un beso fugaz que robó mi alma...
Y de repente me envolvió el abismo
y cada que me acuerdo le doy gracias
y qué mas da ser presa de nostalgias
deseos, dudas, abstinencia pasan
palabras que retumban en mi oído
entre un querer que siempre escapa
y el eco de un deber que nos condena
el alma inmortal pende de un hilo
colgada de la más nimia esperanza
provocando la mano que se harta y habla
del sentir natural que aún respiro
seductor magnetismo que me atrapa
cuando avanzo, mi paso retrocede
absurdo o divertido no descansa
con tinte de deleite y sacrificio
no sé dónde resurge nueva calma
y entera firmeza ante un dilema:
¿atesorar las sensaciones que vivimos?
¿liberar para siempre el deseo fallido?
necesidad de acomodar mismas palabras
y si acaso se asoma la tristeza,
de nuevo, sutilmente silenciarlas
Contener un mensaje que da cuenta
como un ocho formándose no acaba
este amor con forma de infinito
de señales que nacen de mis ganas
recuerdos entre risa, angustia
incertidumbre, lágrimas
todo aquello que bajito nos dijimos
como notas tatuadas en el alma
la más viva pasión se afana
fuego que cede y no se muere
sucumbre, resiste y vuelve al juego
mantiene empecinado al pensamiento
lo asoma al mismo precipicio...
y cierro los ojos...
respiro lento, profundo
y de nuevo cuento, recuento
todo aquello que fue, no fue
pudo haber sido...
